De todas las personas a las que se han querido pocas veces se tiene la dicha de encontrar - aún con desencuentros - aquella única a la que se ha amado.
QUERER es desear poseer en todos los sentidos. Es un sentimiento egoísta y desde la necesidad del que "quiere", una necesidad de curiosidad ... tal vez de capricho... puede ser, de aburrimiento? o solo deseo sexual que se confunde con amor (y dura poco)
pero...
AMAR es algo distinto ! es desear desde lo más profundo de los sentimientos lo mejor para el ser amado y saber ser feliz con su dicha.
AMAR es entender que aunque esté del otro lado del mundo y no te ame y tal vez ni siquiera te recuerde, te haga sentir feliz con solo recordarlo.
AMAR es vivir sintiendo la dicha de ese ser y sentir ternura por ello.
Y a ese ser a quien se ama sin egoísmos (pues el "amor" no lo permite) se le lleva en forma permanente en la parte más tibia, profunda y palpitante del corazón (aunque la medicina lo clasifique como solo un órgano importante) pero es un órgano que palpita más fuerte con los sentimientos porque aún, sin el ser amado saberlo, el corazón lo lleva escondido en lo más recóndito de sus pasajes para que nadie lo descubra ..y se emociona cuando el cerebro lo piensa! (es como una danza maravillosa entre el pensamiento y el corazón)
Solamente el que ama de esa manera, de la única manera que se puede amar para siempre, siente esa felicidad suave que acepta y respeta lo que la Ley de las Probabilidades le hizo que le tocara vivir.
Cuando se ama de esa manera, aun la tristeza es dulce, sin dejar de ser tristeza y sin dejar la dulzura de esos sentimientos.
